martes, 24 de enero de 2012

Elegidos.

La mayoria de los actos que rigen nuestras vidas los llevamos a cabo influenciados por una tendencia erronea.
Siempre, desde el nacimiento, nos movemos para que nos elijan. A ver si no, por que nos especializamos en llorar mas fuerte que los demas.No se como seran las cosas para los hijos unicos, pero los que hemos crecido en un grupo de hermanos, sabemos lo dificil que era conseguir un poco de atencion. Los pequeños de cada casa la lograbamos sin mayores problemas, pero no bastaba. Queriamos que nuestros padres nos eligiesen entre todos sus hijos como el mejor, el mas listo, el mas bueno, lo que fuera. Y no faltaba la competencia en forma de hermano mayor adolescente problematico que lo unico que queria era a su vez que lo eligiesen a el, aunque fuera como el que mas problemas daba.
Es nuestra naturaleza. Queremos destacar, queremos que nos elijan.
Fijemosnos en las actitudes femeninas a lo largo de la historia. La mas guapa del baile, la mas decente, o la mas fresca. La mas inteligente, esto no se llevaba mucho. La mas docil. Todo valia para ser elegidas y llewgar a su meta, que no era otra que el matrimonio. Luego habia que ser la que lavaba mas blanco, la favorita de la suegra, seguia la competicion. Generaciones posteriores se libraban de unos stereotipos y adquirian otros. La mas exitosa en su trabajo. La que mejor compagina la vida familiar. Todo, para que un dia te reciban en casa con un escueto "cariño, eres la mejor".
¿Y en el trabajo?. Lo mismo. La imprescindible, que nad funcionaria sin ella. La confidente de la jefa. La que alcanza mejores cifras de negocio. En estos tiempos, en los qu elas cosas van mal en general, cuando las cifras son malas, consuela mucho ver que las de otros son peores, lo hemos vuelto a conseguir, hemos destacado en algo.
Queremos que nos elijan. Que nos reconozcan, que nos quieran.
Nada mas que falta de autoestima, en el fondo.
Yo un dia me pare a pensar y dije que desde ahora, iba a ser yo la que eligiese ( en lo que podia).Y es mejor. Te quitas varios pesos de encima.
Pero no todos, Seguimos queriendo ser la que mejor hace el bocata a los niños. La que viste con mas estilo y menos dinero ( objetivo que he logrado al 50%, ja,ja). Algunas quieren que las elija el hombre de sus sueños entre todas las mujeres, parece mentira, en pleno siglo xx.Las que somos malas e inmorales, en el fondo, pensamos que ya que para él no podemos ser la primera, si seremos la mas comprensiva. Si eso no puede ser, yo me consuelo pensando que posiblemente yo tengo el culo mas alto, tanto da.
Bueno, son muchos años quitandose telarañas y envolviendose en cierto cinismo que ayuda a vivir.Si no puedes ser la que mejor hace el bocata, daselo una hora tarde, que lo van a pillar con tantas ganas que les parecera el mejor del mundo, y eso vale para todo. Oye, y se que no soy la que mejor escribe, pero soy la que mejor se lo pasa, seguro. Media hora llevo aqui sentada soltando lo que se me pasa por la cabeza y tan a gusto que me he quedado.

3 comentarios:

  1. Me alegro de que te hayas divertido escribiéndolo. Es posible que tu teoría sea aplicable a muchas cosas, pero explícame qué tiene que ver el que me guste dar azotes con la necesidad de reconocimiento o afecto. Es un poco retorcido, ¿no?

    Saludos.

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    Respuestas
    1. no, eso, que yo sepa no tiene que ver nada. Si en algun rinconcillo de tu cabeza hay algo que te lleve a querer ser considerado el mejor spanker, eso ya se ajustaria a mi teoria.Y puede que yo sea un poco retorcida, pero nadie es perfecto.

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  2. Cuando azoto, no pienso en ser el mejor o el peor. Simplemente, me olvido de todo lo demás.
    Nadie es perfecto, ni falta que hace.

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